Construye tu futuro

Creamos cada pieza en nuestro taller a fuego lento, reivindicamos la vida slow, a otro ritmo, con calma.  

Buscamos provocar un cambio positivo en nuestra cultura actual, generando un vínculo emocional con el propietario de las piezas y dejando un legado para las generaciones futuras. Creando recuerdos, celebrando la vida, viviendo historias, historias que nunca terminan.  

Hoy la vida va a cámara rápida, en x 2 de WhatsApp, comida rápida, moda rápida… TODO rápido. Las prisas, la necesidad de tenerlo todo, la inmediatez, estar conectados, las listas infinitas… forman parte de un estilo de vida que nos lleva a no apreciar los pequeños detalles. Nos impide pararnos a escuchar el canto de los pájaros, ver florecer los almendros, o conectar con nosotros mismos. 

Nosotros reivindicamos el retorno a la vida más tranquila, que nos permita disfrutar del café de la mañana, de respirar aire puro y de pasear sin un rumbo fijo. Por eso nos sumamos al slow movement a través del slow furniture, creando el slow Capri. Si lo lees un poco “rápido” parece un trabalenguas, pero precisamente va de eso, de leerlo lento, de pararse.  

 

Basamos nuestro trabajo en la fabricación consciente, nuestras piezas son totalmente artesanas, y fabricarlas lleva su tiempo. Son piezas únicas para ello elegimos las mejores materias primas que trabajamos en nuestro taller de pueblo, para así reducir nuestra huella ambiental.  

Solo usamos madera de verdad, lo cual nos permite crear piezas resistentes al paso del tiempo, que acumulen historias y recuerdos.  

Esta forma de crear es lo que llamamos slow furniture: respetar los tiempos de la madera, su historia y los procesos de toda la vida. Esta fabricación consciente hace que solo fabriquemos bajo demanda para evitar consumir recursos innecesarios y producir excesos de stock, porque cuando creamos cada pieza esta es especialmente para ti.   

Es en realidad una vuelta a los orígenes, facilita el trato humano, la personalización y una producción más sostenible.  

Cámbiate a la vida lenta.

Conecta con tu entorno, con tu gente. Baja el ritmo y vive la vida por momentos, creando recuerdos. Disfrutando, celebrando y saboreando la vida.