Brianda y Alejandro nos transportaron a la Tierra Media en el histórico Parador de Chinchón. Su boda fue una oda a su fanatismo por El Señor de los Anillos, fusionando la épica de Tolkien con un estilo romántico y de cuento.

La bienvenida ya susurraba magia con un espejo con borde dorado que, sobre un mar de flores, parecía abrir un portal. Las composiciones florales, en delicados tonos rosas y blancos, nacían del suelo, combinadas con ramas secas y tela de gasa, creando un ambiente orgánico y misterioso, presidido por una frase muy personal de la pareja.

El Seating Plan fue la pieza central de su homenaje a la fantasía. Diseñamos los planes de mesa como libros de tapa dura, inspirados en las historias de la Tierra Media. Cada libro, colocado sobre un escritorio cubierto de musgo (¡una paradoja que amamos!), contenía en su interior una rosa blanca, revelando la mesa a los invitados.

Esta genialidad se extendió al banquete, pues los meseros eran las carcasas de esos mismos libros. Una boda donde cada detalle, desde el musgo del escritorio hasta el diseño de las cubiertas, demostró que el amor, como la fantasía, está lleno de historias maravillosas.